Cuatro pasos para diseñar un sistema anticaídas efectivo

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Proteger a los operarios que trabajan en altura es un gran desafío para los especialistas en seguridad en altura. Debido a la naturaleza de las labores y los riesgos que presenta, estos ambientes crean algunas de las condiciones de trabajo más peligrosas. De hecho, en España, en el 2019, se produjeron 76 accidentes mortales a causa de caídas desde altura en el trabajo.

Una forma de abordar este desafío es desarrollando un sistema de protección contra caídas efectivo. Por eso, en Europeanprof, proporcionamos cuatro pasos que puede ayudar a garantizar el diseño de un sistema de caídas que reduzca al mínimo los accidentes.

1. Diseña el sistema anticaídas con los trabajadores en mente

Cada fuerza laboral es diferente. Los contratistas y los profesionales de la seguridad deben recordar que los sistemas de protección contra caídas deben ser diseñados de tal forma que se adapten a sus trabajadores, y no al revés. Estos sistemas deben estar diseñados según las tareas de los trabajadores, en lugar de forzar a los trabajadores a cambiar para adaptarse al diseño y a las limitaciones del sistema. Por lo tanto, se debe conversar con ellos y realizar el diseño con sus necesidades en mente.

Una parte crucial de un sistema de protección contra caídas es contar con una persona cualificada con la capacitación, la experiencia y la experiencia apropiada para las situaciones a las que están expuestos los trabajadores. Aunque muchas fallas de un sistema anticaídas debido a una ingeniería incorrecta pueden ser obvias, fallar en diseñar de forma apropiada un sistema anticaídas enfocado en el desempeño humano y una mentalidad en la seguridad puede ser catastrófico.

2. Prueba los equipos

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Para tener un sistema efectivo, debes contar con las herramientas adecuadas para el trabajo. Probar las líneas de vida horizontales y otros equipos de protección individual proporciona la garantía de ofrecer niveles apropiados de seguridad durante su uso en un contexto real.

Probar el producto es crucial para establecer una expectativa base del rendimiento del equipo. Sin embargo, aunque la prueba es importante, lo es aún más que el uso en el campo se alinee con las pruebas para garantizar que el equipo funcione bien en el campo.

En este sentido, se recomienda que los contratistas trabajen de cerca con los fabricantes para que estos tengan un mejor conocimiento de la fuerza de trabajo y de las labores que se realizan. Con esto podrán desarrollar equipos de seguridad adecuados para cada trabajador y proyecto.

3. Formación a los trabajadores

Al capacitar a los trabajadores en el uso correcto de un sistema de protección contra caídas, recuerda que estos equipos no son tan comunes como otras formas de EPI, como los cascos, las botas o los guantes. En consecuencia, no basta con simplemente proporcionar el arnés o la línea de vida horizontal y asumir que ellos sabrán cómo colocarlos y usarlos adecuadamente. Los equipos anticaídas no son tan intuitivos porque las personas no los usan tanto en su vida diaria.

Es importante que la capacitación sea desarrollada según los peligros específicos identificados en un proyecto en particular. Entonces, la capacitación puede ser creada según el sistema, el equipo, el plan de rescate empleados y debe incluir la inspección previa, el ensamblado, uso y desensamblado del equipo de protección anticaídas.

Un aspecto fundamental de la capacitación es comunicar a los trabajadores que su seguridad depende de no desviarse del sistema. No debe permitir que improvisen con el equipo.

4. Inspecciona el equipo

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Una vez que tienes el equipo correcto para diferentes ambientes de trabajo, debe recibir el mantenimiento apropiada para que los trabajadores permanezcan seguros. Los equipos de protección contra caídas se utilizan en ambientes muy diversos, por lo que pueden sufrir un gran desgaste. Por ejemplo, en construcciones, el polvo y las chispas de las soldaduras pueden deteriorar los equipos hechos de material textil. De igual manera, en ambientes de fábricas, los aceites, las grasas y los químicos pueden ser una gran preocupación para la integridad estructural de los equipos.

Por eso, las empresas, los trabajadores y las personas competentes deben inspeccionar el equipo y garantizar su seguridad en el uso.

  • Inspección previa: El usuario examina el equipo antes de un turno para garantizar que su uso sea seguro.
  • Inspección formal: Realizado por una persona competente (diferente al usuario), esta inspección se realiza, por lo general, cada 6 o 12 meses.

Sigue estos pasos y consejos para crear un ambiente más seguro para los trabajadores que laboran en altura.

En Eurpeanprof nos encargamos de la instalación de equipos de seguridad y en la venta de sistemas de seguridad, como líneas de vida horizontales. Si deseas más información, comunícate con nosotros.